El presente informe del Comité Científico de la AESAN analiza cómo el cambio climático está influyendo en el aumento de las alergias alimentarias, una condición con alta prevalencia y creciente impacto en la salud pública. El calentamiento global, el aumento de las emisiones de CO₂ y la contaminación están modificando la distribución de especies vegetales y la producción de alérgenos, tanto en el polen como en los alimentos. Estos cambios, junto con la pérdida de biodiversidad y la alteración de la microbiota intestinal, están debilitando la tolerancia inmunológica y favoreciendo la aparición de alergias alimentarias.
Además, el informe destaca cómo el estilo de vida moderno —caracterizado por dietas menos diversas, el uso de conservantes y envases plásticos, y la exposición a micro y nanoplásticos— contribuye a la disbiosis intestinal y a la sensibilización alérgica. Se subraya la necesidad urgente de adoptar medidas para mitigar el cambio climático y proteger la salud humana, promoviendo una alimentación más diversa, sostenible y segura, así como políticas públicas que reduzcan la exposición a contaminantes y refuercen la resiliencia del sistema inmunológico.