Running on empty: The world is gearing up for climate resilience — without the money to get there

El Informe actualiza los costos estimados del financiamiento necesario para la adaptación en los países en desarrollo, situándolos en US$ 310.000 millones por año para 2035, según costos modelizados. Si se basan en las necesidades extrapoladas expresadas en las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (CDN) y los Planes Nacionales de Adaptación, esta cifra asciende a US$ 365.000 millones anuales. Mientras tanto, los flujos de financiamiento público internacional para la adaptación destinados a países en desarrollo fueron de US$ 26.000 millones en 2023, una disminución respecto a los US$ 28.000 millones del año anterior. Esto significa que las necesidades de financiamiento para la adaptación en los países en desarrollo son entre 12 y 14 veces mayores que los flujos actuales.

Si las tendencias actuales de financiamiento continúan, no se alcanzará el objetivo del Pacto Climático de Glasgow de duplicar el financiamiento público internacional para la adaptación desde los niveles de 2019 para 2025. Además, el Nuevo Objetivo Colectivo Cuantificado para el financiamiento climático no es lo suficientemente ambicioso como para cerrar esta brecha. El sector privado podría aportar más —posee la capacidad de proveer hasta US$ 50.000 millones por año, si se le respalda con políticas específicas y soluciones de financiamiento combinado.

Aunque insuficiente, hay avances visibles en cerrar la brecha de planificación e implementación. La mayoría de los países ya cuentan con al menos una política, estrategia o plan nacional de adaptación; los países están mejorando su capacidad de incorporar la adaptación en su planificación más amplia del desarrollo nacional; y los países informaron sobre más de 1.600 acciones de adaptación implementadas, principalmente en biodiversidad, agricultura, agua e infraestructura. El apoyo de los fondos climáticos para nuevos proyectos de adaptación aumentó en 2024, aunque las restricciones financieras emergentes hacen que el futuro sea incierto.

Tanto el financiamiento público como el privado deben intensificarse para aumentar la adaptación, cuidando de no incrementar la proporción de instrumentos de deuda utilizados por las naciones más vulnerables.

Año de publicación

2025

Fecha incorporación / actualización

Publica

Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA)

Idioma de Publicación

Inglés